lunes, 1 de septiembre de 2008

Me da vergüenza llorar en frente de los demás, y si lo hago, siempre trato de mantener mis ojos cerrados... nunca me gustaron mis ojos anegados; No me gusta demostrar que estoy triste, si lo hago es porque necesito de alguna manera desquitarme con algo, pero nunca con alguien; Cuando estoy enojada conmigo misma, lo mejor que puedo hacer es encerrarme en alguna parte, y llorar tranquila... siempre me hizo bien desquitarme sólo con lágrimas, a pesar de que muchas veces la recuperación sea tan lenta, precisamente, por llorar sola. Hoy es uno de ésos días en los que sólo puedo sentirme conforme si lloro "dentro de mí misma"... me siento demasiado incómoda conmigo y mis errores repetitivos, que parecen que no voy a corregir más...

No hay comentarios: