sábado, 28 de enero de 2012

¿Todo llega?

Nunca fui una mina de muchos amigos. Y no lo digo como algo penoso... porque sí, conozco bastante gente, me llevo bien con ellos, pero sólo con una muy reducida parte de todos ellos sentí tener una especie de afinidad especial.

Sin embargo, hay momentos como este en el que dudo, en el que pienso y pienso tratando de encontrar hechos que me demuestren que las personas que quiero se sienten de la misma forma conmigo... o al menos no puedo evitar preguntarme: ¿En el hombro de quién fui a llorar? ¿Con quién compartí tantos secretos y tantas risas? No puedo evitar dudar sobre la fidelidad de los amigos que tengo... ¿Realmente son mis amigos? ¿Cómo me puedo dar cuenta de ello? Necesito pruebas positivas que me lo sigan demostrando... pero lo negativo siempre termina pisoteando todo lo bueno que puedo encontrar, inexorablemente.

Si hay algo que realmente nunca me gustó hacer es dar recriminaciones, no me gusta pelear, pero hay cosas que me confunden, y me cansan demasiado.
En este caso, ME CANSÉ de que todo lo que haga se base en las necesidades de los demás. Estoy harta de tratar de ser buena y paciente, de tratar de entender y de ponerme en el lugar del otro siempre, de decir "No... él en mi lugar haría lo mismo...". Es mentira.

Me cansé de ser la estúpida que siempre se preocupa por todo y por todos, que piensa en todo, todo el día y todos los días... mientras que los demás terminan demostrando que vos les chupás un huevo. Estoy HARTA de llorar por las noches a escondidas y sonreír lagrimeando pensando en que las cosas van a cambiar; estoy podrida de dar todo esperando con mucha paciencia recibir algo que nunca va a llegar a cambio; Realmente no tolero más ser la idiota a la que nunca importa si le hacés algo malo o no, porque total nunca se enoja.

De verdad, siempre traté de no hacer recriminaciones a nadie nunca, o al menos lo menor posible; siempre cedí ante las discusiones, nunca fui orgullosa... y siempre me alejé de los lugares donde notaba que estaba de más. Traté de mantenerme así porque no me gusta pelear ni molestar a nadie, siempre me moví según las decisiones del otro con tal de estar bien; y la verdad que no doy más porque parece que las personas de verdad son egoístas, y nunca se van a preocupar realmente por vos ni se van a dar cuenta del sacrificio sobrehumano que estás haciendo por ellas...

Y no es que ahora voy a escribir cartas a la gente diciéndole todo lo que me hicieron, no voy a martirizarme contádoles como me siento al respecto ni mucho menos tratar de dar pena porque esa sí me parece una actitud que ni yo podría soportar de alguien; pero necesito formar mi carácter y pensar más en mí, tengo que reconocer que si lo hiciera, no estaría siendo egocéntrica, sino que estaría tratando de recuperar mi autoestima...

Y sé que no es la primera vez que lo digo, pero tengo que ser más independiente anímicamente también, y no esperar nada más de nadie porque hasta a los que creí mis amigos terminaron haciéndome sentir así... así que ojalá pueda cambiar esto pronto, porque estoy segura de que sólo siendo así voy a darme cuenta de a quiénes les importa que esté a su lado, y a quiénes no.

2 comentarios:

Pablo Galván dijo...

Yo también me he preguntado más de una vez si tenía amigos de verdad... cierto es que cuando hago esa especie de "balance", también dudo sobre si ellos me aguantarían a mi de la misma forma que yo los aguanto a ellos; porque como vos, soy el que nunca se enoja y el que siempre está para ellos, aunque ellos no estén cuando yo los necesite. De todas fomras creo que la mayoría de las veces son sólo impresiones mias que no son ciertas. Aunque es bueno que empieces a formar tu caracter y tu autoestima. Saludos! ;)

ALA_STRANGE dijo...

spero que hays hays salido de las dudas y el mal momento.

PD. me gusto chatear con vos

besos